– Tú eres Tokio.
Me dice justo después de ajustarme la camiseta, con una sonrisa y mirando el contraste entre el cuello Peter Pan y mis botas de lentejuelas. (Otra ya habría gritado y salido corriendo).
Pero así es Raquel, un ángel, arte y talento por los cuatro costados. La adoro. Así que pasar una tarde con ella en El Recreo fue fantástico. Todavía huelo el Rooibos de la tetera.
En la página web y su página de Facebook encontraréis fotillos de la sesión, muchas de las prendas son las que han realizado las alumnas, muy guay todo. Y yo encantada de que me vistan, me pinten y me digan cosas bonitas. ¿Quién no?
No tengo ni idea de como hacer ese cuello... Tendré que ir a aprender porque quiero esa prenda en mi armario, y no dejar nunca de ser Tokio...
Photos by David Outeiral.